Matthieu Ricard es su nombre, y no quiere una bonita casa en la playa, prefiere el monasterio apartado de toda civilización donde vive, en las montañas de Nepal. Tampoco quiere una cuenta bancaria boyante; ha entregado todo el dinero de las ventas de sus libros a la caridad. ¿Quizá un matrimonio bien avenido o una excitante vida sexual? Tampoco: a los 30 años decidió acogerse al celibato y dice cumplirlo sin descuidos. En realidad, Matthieu Ricard carece de todas las cosas que los demás perseguimos con el convencimiento de que nos harán un poco más felices. Y sin embargo, este francés de 61 años, biólogo molecular hasta que decidió dejarlo todo y seguir el camino de Buda, es más feliz que usted y yo. Mucho más feliz. El más feliz.
Este budista francés no plantea que su modo de vida deba ser adoptado por todo el mundo para lograr la felicidad. Por el contrario, con mucha razón plantea que la felicidad está dentro de nosotros, y que ésta puede aprenderse y entrenarse, sabiendo dónde mirar y hacia dónde dirigirse.
Es este un planteamiento que tal vez haga derribar muchas de las barreras que nuestro modo de vida material impone, pero que no dejan por esto de ser menos válidas que nuestros ideales convencionales. No olvidemos que hablamos del hombre más feliz del mundo.
10 comentarios:
Es gracioso, actúa y habla con naturalidad. Y parece feliz. No sé si es el más feliz del mundo, pero haberlo tenido todo y abandonarlo para buscar la felicidad es un ejemplo de inteligencia. Ese ha de ser nuestro primer principio: Ser feliz, sin olvidar a ayudar a que los demás lo sean también.
Salud y República
Desde luego que impacta su testimonio. Lo importante en la vida es ser feliz y cada cual debe de encontrar el modo de serlo.
Un besote feliz Dean!! ;P
Arwen
Pues lo del dinero y las posesiones lo puedo entender. Lo del celibato, la verdad que no. Aunque como dice él, que cada uno haga lo que quiera en su camino a la felicidad
Carpe Diem
Sabes lo que me sucede con esta gente? Que les oigo hablar y me transmiten una paz y un sosiego que me creo a pies juntillas que es feliz
Besitossss
Qué envidia que me da este hombre... a ver si aprendemos los demas tb a ser felicesn que seguro que no es tan difícil como parece...
dirty saludos¡¡¡
No sé si es el más feliz, tal vez lo que ha hecho es síntoma de que ha sido muy infeliz a pesar de tenerlo todo.
Creo que los extremos son malos, me quedo en el medio en los tonos pasteles. Conozco mucho de la filosofía oriental...y es absolutamente respetable desde ya, pero como occidental que soy, me quedo buscando los puntos medios...
Un abrazo
Yo me iba con el pero ya. Estoy saturada de vivir de esta manera y eso que yo vivo en un sitio privilegiado. Pero trabajamos como tontos para adquirir cosas que no nos hacen felices...Lo de siempre pero que no arreglamos nunca.
Un besote
Maria
Podemos ser felices en nuestra propia soledad,en nuestro propio ombligo?
El ser humano será más feliz a medida que vea que sus congéneres lo sean ya que nuestra pertenencia tribal nos obliga a ello.
Nos pertenecemos en 'comunión'exacta con nuestros prójimos.Su felicidad en nuestra felicidad
Es cuestión de compromiso social y no de ascetismo.
Lo más fácil es coger una lata de sardinas y olvidarnos del mundo.
Saludos
No se si la felicidad consiste en renunciar a todo y meterte en un monasterio budista. No se. No se si es cierto que sea más feliz por haber dejado todo. Depende de lo que busques, y si esa felicidad está dentro de nosotros, no hace falta olvidarse de nuestro propio entorno ya que ahí también podría encontrarse, no?
En todo caso si Matthieu Ricard se siente contento con su decisión, pues genial. Cada uno encuentra el equilibrio allá donde puede.
Un beso
Jatetú que una de mis máximas es la frase que tengo en el blog sobre la felicidad haciendo referencia que lo importante para conseguirla es estar contentos con lo que hacemos que en definitiva es con nosotros mismos.
Un abrazo.
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