Cada vez que llego a casa y la tele está encendida, advierto que se está corriendo un grave riesgo, ya que el 90% de lo que allí se dice es de caracter engañoso, y sobre todo, el lenguaje utilizado oculta la verdad o la disfraza para que el común de la gente no se entere de la forma vil y descarada como está siendo explotada y para que siga en su estado de esclavitud sin protestar. Desfortunadamente los medios de difusión de la información están al servicio del poder y la gente va a la universidad a estudiar periodismo cuando realmente lo que está aprendiendo es a mentir de forma soterrada y la mayoría de las veces ni siquiera trata de ocultarlo. Así es como nos encontramos a diario que:
El capitalismo luce el nombre artístico de economía de mercado;
el imperialismo se llama globalización;
las víctimas del imperialismo se llaman países en vías de desarrollo, que es como llamar niños
a los enanos;
el oportunismo se llama pragmatismo;
la traición se llama realismo;
los pobres se llaman carentes, o carenciados, o personas de escasos recursos;
la expulsión de los niños pobres por el sistema educativo se conoce bajo el nombre de deserción escolar;
el derecho del patrón a despedir al obrero sin indemnización ni explicación se llama flexibilización del mercado laboral;
el lenguaje oficial reconoce los derechos de las mujeres, entre los derechos de las minorías, como si la mitad masculina de la humanidad fuera la mayoría;
las torturas se llaman apremios ilegales, o también presiones físicas y psicológicas;
cuando los ladrones son de buena familia, no son ladrones, sino cleptómanos;
el saqueo de los fondos públicos por los políticos corruptos responde al nombre de enriquecimiento ilícito.
Esta escuela de la democracia en la que hemos crecido, no exige examen de admisión, no cobra matrícula y gratuitamente
dicta sus cursos a todos y en todas partes, así en la tierra como en el
cielo: por algo es hija del sistema que ha conquistado, por primera vez
en toda la historia de la humanidad, el poder universal.
Desprecia la honestidad, castiga el trabajo, recompensa la falta de escrúpulos y alimenta el canibalismo.
Cuando un delincuente mata por alguna deuda impaga, la ejecución se llama ajuste de cuentas
y se llama plan de ajuste a la ejecución de un país endeudado, cuando la tecnocracia internacional decide liquidarlo. El malevaje financiero secuestra paises y los cocina si no pagan el rescate.
4 comentarios:
Ya lo dijo el maestro y poeta Jose Marti en 1898: Ser cultos es el unico modo de ser libres...
Barbara tu entrada de hoy!!
Un abrazo
Eufemismos, engaños. Dulcifican las palabras para endurecer los hechos.
Salud y República
Es cierto que cuando escucho la radio, la televisión o leo la prensa diaria, parece que el mundo se va a acabar, creo que hemos pasado tiempos peores, no solo en tiempos más que pretéritos, algunos lo vivimos en los años 70, 80 y 90, como vemos, España y el mundo en general está en crisis permanente y la gente vive, es cierto que unos mejor que otros, que por ello tenemos que revelarnos y pelear por una mejora de la sociedad, pero no porque en estos momentos haya estallado una burbuja de los cojones, hay que hacerlo siempre, y reconocer que también hay políticos honestos y decentes; se ha vestido a la política de deshonestidad y son unos pocos que mandan mucho los que se dedican a joderla y que igualmente estaría haciendo lo mismo desde otros lugares.
Como dijo Aristóteles el hombre es un animal político, si desprestigiamos a la política lo hacemos con el hombre, expulsemos a los malos políticos.
Un saludo
Un abrazo.
y al decrecimiento se le llama crecimiento negativo ¿?
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