Un famoso diario norteamericano convenció a Joshua Bell, para realizar un experimento que consistía en interpretar lo mejor de su repertorio en el metro de Washington en hora punta y el resultado habla por sí solo; nadie se detenía a escuchar a este virtuoso de la música, algunos tiraban una moneda sin deter su rápido caminar, mientras que el día anterior en un auditorio reconocido se pagaban arriba de 150 dólares por verle actuar y se habían agotado las localidades. Para el intérprete lo más curioso es no haber escuchado ni un solo aplauso en su actuación del metro pero si haber recaudado más de 30 dólares en una hora. Las prisas de este mundo nos impiden apreciar las cosas más bellas de la vida, tal como le sucedió a las miles de personas que pasaron por el metro ese día en que este maravilloso violinista, con un instrumento valorado en U$ 3,5 millones, interpretaba lo mejor de Bach.
Anton Bruckner
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*Anton Bruckner. Caricatura de Pablo Morales de los Ríos *
Parece que actualmente Anton Bruckner (1824-1896) no está muy de moda.
Tiene detractores y es...
Hace 10 horas
8 comentarios:
Poderoso caballero don don don din din dinero
a veces entre lo cotidiano deberiamos permitirnos disfrutar ... o poner atención. a veces cuesta menos de un dolar
:D
Curioso,muy curioso,lo que nos viene a demostrar la deshumanización de nuestras ciudades donde los seres humanos son víctimas de una vida de prisas y trabajo que no dejan un instante de reposo.
Muy curioso lo que cuentas
Saludos
Una posible solución sería acudir a las obligaciones con tiempo suficiente, pero ésto no deja de ser una justificación, pues quien se topa con la belleza (y la reconoce) no tiene inconveniente alguno en detenerse a disfrutarla.
Te dejo un beso, Dean.
Efectivamente pasamos por el mundo sin ver lo más cercano. Eso siempre parece no tener importancia. Sólo cuando algo está rodeado de glamour, es publicitado y reconocido parece que nos fijamos.
¡Cuántos placeres se nos escaparán!
Salud y República
Este relato es un muestra más de que la mayoria de las personas "sigue la manada". Se dicen cultos, se dicen especiales, que tiene acceso a lugares que otros no... y luego no pueden reconocer la interpretación ni facciones de quien vieron y escucharon la noche anterior en el gran y costoso teatro.
No tienen tiempo a detenerse ante otros, ellos son el ombligo del mundo... así estamos.
Un día la hipocresía debería acabar...
Abrazos.
Se valora mas lo que "cuesta" dinero....
Que maravilla!!!
Me quedo disfrutando un rato de esta delicia.
Saludos.
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