La tecnología para los deportistas, no para los árbitros

No es ningún secreto que los atletas se basan en la tecnología para mejorar su rendimiento; sin embargo, los árbitros no son tan afortunados, a pesar de las muchas tecnologías que podrían ayudarles a tomar las llamadas decisiones y sentencias, los prejuicios en contra de la introducción de estas tecnologías para la toma de decisiones en materia de deporte todavía tienen gran influencia en nuestra sociedad.

Por ejemplo, incluso la tecnología de reproducción de vídeo se le niega a los árbitros en el fútbol y otros deportes, aunque los estudios coinciden en que se suele juzgar mal, en situaciones que se desarrollan rápidamente.

No sólo la tecnología puede ayudar a hacer cumplir las normas, podría incluso asumir totalmente la tarea. Un reciente estudio en el Instituto Australiano de Deporte que mostró cómo un árbitro puede juzgar subjetivamente una competencia de snow-board, ofrece un buen ejemplo.

Jason William Harding, , y sus colegas elaboraron un sistema de sensores portátiles para probar si las mediciones de precisión de los competidores podrían proporcionar una justa medida, y un estándar de rendimiento mejor que los proporcionados por los jueces humanos.

Pero a pesar de esta prometedora demostración, Harding del equipo encontró que pocos directivos relacionados con el deporte verían con agrado este cambio. La élite de los snowboarders que los investigadores encuestaron, reconocieron la falibilidad humana y la subjetividad de los jueces, pero no quieren un reemplazo tecnológico.

El equipo sugiere que es porque hay muy arraigados temores de que la tecnología puede cambiar la cara de un deporte, con consecuencias negativas no deseadas. Sin embargo, los deportes profesionales se apresuran a aprovechar las ventajas de la tecnología para mejorar su propio desempeño, aun cuando esto también puede tener un impacto negativo en la percepción de este deporte. Por ejemplo, la mejora de raquetas de tenis ha requerido cambios en las normas; Jugadores de fútbol americano y ciclistas tragan pastillas para controlar y transmitir su temperatura corporal a los directores de equipo.

Los árbitros tienen en sus manos alguna tecnología avanzada, que ya es mucho, para la mejora de la equidad de algunos deportes. Por ejemplo, El ojo de Halcón para examinar las jugadas controvertidas en el tenis, y cámaras de foto-finish para el ciclismo y atletismo, que pueden tomar fotos en milésimas de segundo para revelar el ganador.

Pero el potencial de la tecnología puede hacer mucho más - incluso hacerse cargo de la aplicación de las normas por completo. Se podrían ahorrar en algunos deportes desagradables consecuencias por un mal arbitraje, que en casos extremos puede dar lugar a amenazas de muerte, también se podría limitar el alcance de los funcionarios corruptos para influir en un juego.

Así que tal vez ha llegado el momento para los aficionados, competidores, organizadores del deporte que abrazan la tecnología en muchas áreas para permitir a los árbitros hacer lo mismo.