De bolsillo

Aún recuerdo cuando empecé en la Universidad, que la UCP (unidad central de procesamiento) del ordenador único allí, era del tamaño de un salón completo (unos 100 metros cuadrados), y los discos para el almacenamiento de memoria eran iguales a las cintas de cine antiguas, guardados también en cajas metálicas. Poco tiempo después llegaron a la Universidad los ordenadores personales (microprocesadores) y los discos flexibles, el tamaño ya era casi como el actual pero la capacidad de procesamiento muy inferior, mi primer ordenador personal tenía un megabyte de memoria RAM. Esto fue posible gracias a la creación de los chips o pastillas de silicio que integraban un circuito, su tamaño, unos pocos milímetros:


Los chips se han ido haciendo cada vez más pequeños y su capacidad ha ido aumentando; estos circuitos integrados están compuestos de transistores y según la conocida Ley de Moore, cada 18 meses el número de transistores por chip se duplica. Ahora viene la pregunta, hasta cuando será esto?.
Seguramente que ahora que se ha llegado a un tamaño tan chico como el de un átomo, no se utilizará más el silicio como sistema para integrar los transistores, sino que harán falta otros materiales y otras leyes serán las que rijan estas nuevas dimensiones, las de la mecánica cuántica, y a su vez los ordenadores serán ordenadores cuánticos, y el prefijo a utilizar en todas las dimensiones, y todos los nombres es el nano, nanopartículas, nanotecnología, etc. Aparece un dispositivo basado en nanotubos de carbono ensamblados, capaz de ejecutar cálculos lógicos simples, y se abre el camino a ordenadores muy pequeños, se dice que hasta 50 veces más chicos que los actuales, y a velocidades de vértigo, hasta mil veces las actuales (velocidades de procesamiento de datos).
O sea que muy pronto tendrás en el bolsillo un ordenador muy potente, y que pasará cuando te subas al avión?, seguro que no lo podrás llevar. Y que hará un chico de 10 años con una herramienta de estas?, en casa lo controlas un poco, pero si va por la calle con uno de estos, no quiero ni pensar las diabluras que haría.